viernes, 17 de septiembre de 2010


Otro charco más. Otro más que salto sin problema.
¿Porque no será todo tan simple como saltar un charco?
¿Porque me ahogo en cualquien emoción,
situación o sentimiento?
Ultimamente mi cabeza piensa mucho,
mi mente trabaja al cien por cien,
intentando calibrar todo tipo de posibilidades,
recopilando información, actualizando recuerdos,
borrando malos pensamientos.
Tal vez la estoy saturando, tal vez ya esté saturada.
Otro charco. Otro salto.
Y tus labios... buff, como es eso posible, ¿como pueden existir,
tan simples, tan..porque sí, tan puros, tan sinceros y reales?
Cuando nos despedimos intento saborear
cada instante de ese beso, intento que sea apasionado,
intenso...
pero ultimamente nuestros besos no recuerdan
lo que en antaño era despedirse,
lo que era abrazarse entre ellos.


Aunque la temperatura es bastante elevada
esta noche hace algo de frío, nose porque,
alomejor soy yo la que esta fría, o la que lo enfría todo.
Tal vez somos nosotros, o tal vez como ya dije antes,
sea tan solo la noche.

¿Como puede ser que me enloquezca tanto tu piel,
o tus manos o tu sonrisa?
Mmm..Dios, tu sonrisa, eso si que es precioso.
No hay nada mejor que ella.
No puedo dejar de pensar en ti,
aunque la tormenta moje mi rostro,

y el viento lo refresque, aunque tenga los pies humedos y
no deje de saltar uno y otro y otro charco,
aunque los coches pasen junto a mí,
aunque oiga pasos detrás de los míos,

aunque este sola en la noche, andando, en silencio,
no puedo dejar de pensar en ti.

Sé que algo va mal, tú o yo, o lo nuestro,
o el tiempo(¡maldito tiempo!)
pero TIENE QUE ACABAR.
Porque cuando estás te adoro y cuando no estás
eres lo único que tengo en mente.

Porque aunque camine sola, no puedo fijarme en mi alrededor,
porque realmente,
en el fondo, en mi piel, en mi interior,
me acompañas tú, como un ardiente recuerdo,

como una imagen pegada en mi retina.
Porque aunque esté a metros y metros de tí,
para mí es como si jamás hubieras soltado mi mano.

1 comentario: